Descubren dónde ha caído el satélite STS-48 siguiendo a los chatarreros españoles

Somewhere beyond the sea -- A 3º 45' 07'' S, 173º 39' 33'' E, en mitad del Pacífico sur, a centenares de millas de cualquier cosa parecida a tierra, es donde se ha estrellado finalmente el satélite a la deriva STS-48, que según la NASA había de caer la madrugada del 23 en algún punto indeterminado de la Tierra. El objeto, del tamaño de un autobús, no fue detectado por nadie al entrar en la atmósfera, pero la NASA ha descubierto dónde se ha estrellado siguiendo la pista de los chatarreros españoles que acudieron en manada al naufragio espacial. «Conocíamos el protocolo a seguir gracias a la experiencia de anteriores objetos exvolantes», cuenta el profesor Benjamin Russmeyer, del departamento de basura espacial de Cabo Cañaveral. En la NASA saben bien que los legendarios junk hunters, exótico nombre que allí se da a los infrecuentes y casi míticos traperos, siempre llegan al objeto derribado antes que nadie. «Bastó con buscar en el radar un enjambre de embarcaciones saliendo de la periferia de ciudades españolas en dirección al Pacífico. Las seguimos enseguida; eran pequeñas barcazas sin bandera y con la críptica leyenda "se recoje chatara se vazian pisos todo tipo" manuscrita en el casco», relata el fascinado profesor. «Para cuando llegamos, un enjambre de botes, Zodiacs y barcazas se repartía los restos flotantes del satélite, a la vez que jovencitos se sumergían a 5.000 metros a pelo para rescatar metros y metros de cable de cobre.» La NASA no salvó del naufragio más que un par de tornillos de recuerdo, pero le basta con la satisfacción de certificar que el satélite desplomado no ha hecho daño a nadie. «No habría sido la primera vez que nos llevamos una bronca por cargarnos las macetas de alguien», comenta el profesor Russmeyer.

No hay comentarios: